Tomado de La Prensa, 29 de Julio 2008 / http://www.prensa.com/
Más de 40 millones de barriles de petróleo ahorrará este año el gobierno de China, gracias a que prohibieron el uso de bolsas plásticas. Estos productos se confeccionan a partir del polietileno que es un termoplástico que se obtiene del crudo. En tanto que, Irlanda ha disminuido el 90% del uso de estas bolsas, luego de haber anunciado nuevos impuestos a quienes fabriquen estos artículos. Canadá, Bangladesh, Irlanda, Indis del Oeste, Kenya, Tanzania, Singapur, entre otros también prohibieron el uso de estas bolsas, luego que el Programa de Monitoreo de Desechos de la Marina Nacional de EEUU comprobara que el 10% de los desechos que llegan a las costas norteamericanas son bolsas plásticas y que 8 millones de libras de plástico anualmente van a parar a los mares, lagos y ríos, ocasionando la muerte de miles de especies marinas que confunden las bolsas con alimento.
Además de las bolsas plásticas, el 91.7% de los desechos que producimos a diario si son manejados apropiadamente, podrían ser reutilizados o reciclados, continuando así su vida útil, siempre y cuando no se mezclen con desechos. Por ejemplo, materiales orgánicos con gran volumen de uso, como papel y cartón, pueden ser mejor aprovechados al optimizar su utilización y al ser transformados en nueva materia prima. Esto se puede hacer al evitar el desperdicio de papel, reutilizando y reciclando aquel material cuyo uso ya se ha agotado. En Panamá, organismos como MarViva gestionan campañas en pro del uso de las bolsas de reciclajes, mientras que empresas como el Grupo Rey —integrado por Supermercado Rey, Romero y Mr. Precio — crearon conciencia sobre la problemática de los desperdicios al instituir programas que incentivan el reciclaje.
Prueba de ello, es que hoy lanzará su campaña de reciclaje de plástico y cartón, en su primera etapa, a fin de aportar a la conservación del medio ambiente, a través de un proceso integral de recolección y manejo correcto de estos materiales. Estas acciones contribuyen a salvar bosques y las especies que los habitan si se toma en cuenta que por cada tonelada de papel nuevo que se produce, se cortan 150 árboles. Por otro lado, si recicláramos la mitad del papel que se produce en el mundo, salvaríamos más de 7 millones de hectáreas de bosques. Actualmente, el 77% del papel es reciclado en Holanda, 67% en Alemania, 52% en Japón y 45% en EEUU. Panamá también ha avanzado en este tema en los últimos años, pero queda mucha tela que cortar. La Estrella de Panamá, 29 de julio de 2008.
Además de las bolsas plásticas, el 91.7% de los desechos que producimos a diario si son manejados apropiadamente, podrían ser reutilizados o reciclados, continuando así su vida útil, siempre y cuando no se mezclen con desechos. Por ejemplo, materiales orgánicos con gran volumen de uso, como papel y cartón, pueden ser mejor aprovechados al optimizar su utilización y al ser transformados en nueva materia prima. Esto se puede hacer al evitar el desperdicio de papel, reutilizando y reciclando aquel material cuyo uso ya se ha agotado. En Panamá, organismos como MarViva gestionan campañas en pro del uso de las bolsas de reciclajes, mientras que empresas como el Grupo Rey —integrado por Supermercado Rey, Romero y Mr. Precio — crearon conciencia sobre la problemática de los desperdicios al instituir programas que incentivan el reciclaje.
Prueba de ello, es que hoy lanzará su campaña de reciclaje de plástico y cartón, en su primera etapa, a fin de aportar a la conservación del medio ambiente, a través de un proceso integral de recolección y manejo correcto de estos materiales. Estas acciones contribuyen a salvar bosques y las especies que los habitan si se toma en cuenta que por cada tonelada de papel nuevo que se produce, se cortan 150 árboles. Por otro lado, si recicláramos la mitad del papel que se produce en el mundo, salvaríamos más de 7 millones de hectáreas de bosques. Actualmente, el 77% del papel es reciclado en Holanda, 67% en Alemania, 52% en Japón y 45% en EEUU. Panamá también ha avanzado en este tema en los últimos años, pero queda mucha tela que cortar. La Estrella de Panamá, 29 de julio de 2008.
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